GRATIS nuestra GUÍA DE CUIDADOS BÁSICOS del cachorro de Labrador
El temperamento y personalidad del Labrador Retriever se desarrollan a lo largo de toda su vida. Especialmente en los primeros momentos de su vida los acontecimientos que rodean al cachorro marcan su conducta futura, la reactividad ante estímulos nuevos, el instinto hacia el trabajo o la facilidad para el adiestramiento.
Nuestra labor como criadores es ayudar a la familia a encontrar el cachorro que se adapte mejor a sus necesidades, nivel de actividad, tiempo disponible, recursos entre otros. Por ello es fundamental conocer a todos nuestros cachorros en profundidad especialmente en su temperamento potencial.
Para ello existen diversas pruebas que deben pasarse conjuntamente para establecer una evaluación holística (término para referirse a conjunto, general) del cachorro. Gracias a las distintas perspectivas teóricas y prácticas podemos acercarnos desde distintos ángulos al cachorro para conocer qué bases de personalidad posee y su posible adaptación a la futura familia.
Los cachorros de Labrador Retriever, al igual que el resto de razas de perros pueden ser sometidos a distintas pruebas y evaluaciones de carácter para determinar su comportamiento, personalidad y habituación. Los principales test que se utilizan los veremos a continuación:
Este test fue desarrollado por el Dr. Samuel B. Campbell para evaluar el temperamento y la personalidad de los cachorros en una etapa muy temprana de sus vidas, generalmente entre las 7 y 10 semanas. Es uno de los test preferidos por los criadores y amantes de las razas de perros y el más extendido por todo el mundo.
El objetivo principal es predecir como un cachorro podría comportarse en diferentes situaciones a lo largo de su vida adulta. El observador debe registrar las reacciones del cachorro ante una serie de estímulos y situaciones neutras. Los aspectos generales que se evalúan son los siguientes:
Dominancia y sumisión
Socialización
Exploración y curiosidad
Sensibilidad a los ruidos
Seguimiento y juego
Reacción a estímulos visuales
Reacción a la separación
Este test se debe utilizar dentro de un contexto holístico como una herramienta predictiva que tiene posibles sesgos en la toma de datos como la predictibilidad del resultado, la experiencia del propio observador, la familiaridad del cachorro con el humano participante. Los resultados del test deben considerarse en conjunto con otras observaciones y factores.
Además el ambiente y la crianza también juegan un papel fundamental en la formación del comportamiento del cachorro a medida que este va creciendo.
Para la realización del test de Campbell es imprescindible que se den las condiciones siguientes:
Una única persona examinará al cachorro. Es indiferente que le sea conocida o no aunque depende de la opinión de algunos autores.
El cachorro deberá contar exactamente con la edad de siete semanas de vida.
Se le examinará de forma individual y totalmente aislada. Es recomendable que esté en una habitación que no sea ni familiar ni intimidante para él. Sin elementos que puedan distraer o llamar su atención.
El recinto en el que se realicen los test deberá estar tranquilo, sin ruidos y libre de objetos que peudan distraer la atención del cachorro. El espacio debe ser por ejemplo una habitación de unos cuatro metros cuadrados donde el animal no pueda percibir estímulos externos (ruidos de otros animales, coches etc). Las ventanas tendrán que estar cerradas.
Se debe colocar una bombilla en el centro de la habitación. Los cachorros sometidos a este test no deben haber estado antes en esta habitación. Se le examinará de manera individual y completamente aislada.
Los test se harán sin ningún tipo de preparación previa para el cachorro, de forma totalmente neutral y sin felicitarle en ningún momento.
El carácter innato que se determina mediante el test puede modificarse posteriormente, aunque solo en parte mediante el trato y educación que reciba. Si se puede escoger lo mejor es pasar el test a varios cachorros y elegir el que tenga el carácter más adecuado al tipo de vida que pretende llevar.
La fiabilidad del test no es del 100% pero aporta unos datos bastante fiables y por ello es el más popular y usado en todo el mundo. Algunos autores interpretan que no es necesario que el cachorro no conozca a la persona que pasa el test, pero otros observan que sí. Ello dependerá de la disponibilidad de otras personas para que le puedan pasar el test que será preferible.
A nuestro criterio, con una adecuada socialización el Labrador Retriever no debe destacar a nivel negativo en ninguna de las pruebas aunque siempre podemos encontrarnos ante un caso especial. Sería también interesante poder introducir como parte de la prueba la exposición a otros animales como gatos u otro animal desconocido para ellos.
TEST 1. ATRACCIÓN SOCIAL
Colocar al cachorro en el centro del recinto y en silencio alejarse unos pasos (un par de metros) en el sentido opuesto al lugar de la entrada. Arrodillarse y hacer sonar las palmas suavemente para llamar su atención. Con esto pretendemos ver la atracción que tiene el cachorro hacia el ser humano.
RESPUESTA:
A) Viene enseguirda, con el rabo levantado, dando saltos y mordisqueando las manos.
B) Viene sin dificultad, con la cola alta dando con su pata en las manos de quien está haciéndole la prueba.
C) Viene sin dificultad, pero con la cola baja.
D) Viene titubeando.
E) No viene.
TEST 2. SEGUIR AL HUMANO
Situado de pie, al lado del cachorro, comenzar a caminar asegurándose de que el cachorro se da cuenta, es decir que nos observa. Esto nos indica el grado de independencia del cachorro y su aptitud para seguirnos.
RESPUESTA:
A) Sigue sin dificultad, cola arriba tratando de mordisquear los pies.
B) Sigue sin dificultad, cola arriba a los pies pero no los mordisquea.
C) Sigue facilmente, pero con la cola abajo.
D) Sigue titubeando, con la cola abajo.
E) No sigue o se aleja hacia otro lugar.
TEST 3. OBLIGACIÓN
Colocar al cachorro sobre el suelo, boca arriba y mantenerlo así unos 20-30 segundos apoyando la mano sobre su pecho. Esta prueba nos indica si el cachorro es luchador o sumiso viendo la aceptación a la retención incómoda.
RESPUESTA:
A) Lucha vigorosamente, se debate y muerde.
B) Lucha vigorosamente, pero sin moder.
C) Se debate y se queda quieto. Puede intentar lamernos las manos.
D) No se mueve y lame las manos.
TEST 4. DOMINANCIA SOCIAL (Aceptación a la dominación del ser humano)
Arrodillado al lado del cachorro, golpearle suavemente la parte posterior del cráneo bajando a lo largo de la columna vertebral sobre el dorso y acariciarle a contrapelo sobre la misma región durante treinta segundos. Un perro sumiso será fácilmente manipulable mientras que un dominante intentará revelarse al sometimiento.
RESPUESTA:
A) Salta, da patadas, muerde y gruñe.
B) Salta, da con las patas.
C) Se retuerce, lame las manos.
D) Se da la vuelta boca arriba y lame las manos.
E) Se aleja y no vuelve.
TEST 5. DIGNIDAD
Colocar las manos entrecruzadas bajo el tórax del cachorro y levantarle de forma que sus patas no toquen el suelo. Mantenerlo en esta posición durante 20-30 segundos. Pretendemos ver su reacción frente a la pérdida de control de su posición, según se revele o no, nos indicará el grado de orgullo, dignidad y su actitud frente a una obligación social impuesta.
RESPUESTA:
A) Se debate energéticamente, muerde y gruñe.
B) Se debate mucho, pero sin llegar a morder.
C) Se debate poco tiempo, se calma y lame las manos.
D) No se mueve y lame las manos.
Con estos datos tenemos una base firme donde podemos apoyarnos, especialmente si el perro va a estar con niños, con otros perros, con ancianos o mucho tiempo en casa solos. Si va a estar en familia escogeremos a un perro de caracter tranquilo y amable pero con muchas ganas de jugar. Si lo que queremos es caza deberá tener un temperamento más fuerte y ser más inquieto y nervioso. Si es para personas mayores, serán animales con un carácter dependiente y sumiso además de ser tranquilos y amables.
El cachorro ideal será aquel que sea equilibrado, ni miedoso ni agresivo, que acuda a nuestra llamada y que se sienta agusto con nosotros y en nuestra compañía. Esto denota que ha estado encontacto estrecho con personas en las etapas de socialización y que ha adquirido una habitación por parte del criador. No hay un perro perfecto, sino que debemos conseguir que nuestro perro se adapte a nuestra forma de vida y no al revés.
Dominante agresivo (dos "A" con alguna "B"): Cachorro dominante y agresivo. Habra que tratarlo con cuidado puesto que puede aumentar su agresividad según vaya creciendo. No conviene hacerle de rabiar por lo que no es aconsejable su trato con niños. Debe ser llevado de manera equilibrada. Será un adulto con grandes capacidades defensivas en casos de peligro, como un excelente perro guardián de la casa. Tendrá conflictos con otros perros por su marcado carácter.
Dominante extrovertido (tres o más "B"): Perro dominante que deberá ser educado con suavidad pero con firmeza. No se aconseja su convivencia con niños. Óptimo como perro de caza sobretodo donde haya contacto con animales a cazar.
Equilibrado (tres o más "C"): Perro relativamente equilibrado, capaz de integrarse sin problemas en cualquier hogar. Ni demasiado agresivo ni demasiado sumiso. Puede convivir tranquilamente con niños. Es el perro ideal para cualquier familia.
Sumiso (tres o más "D" con una o varias "E"): Perro muy sumiso, sensible a las reprimendas que necesita mucho cariño. Si se le instiga demasiado podrá hacerse pipí por sumisión. Conviene darle confianza a sí mismo. Podría poder por temor si se siente acorralado o incapaz de huir. Sensible y cariñoso. Puede convivir con niños y personas mayores. Necesita mucho afecto y es muy sensible a los retos. No apto para la caza por su inseguridad y miedo.
Independiente y mal socializado (dos o más "E"): cachorro muy difícil de educar, independiente que solo hace lo que le da la gana. Puede atacar y morder si se le castiga e incluso volverse extremadamente feroz. Evitar su contacto con niños y personas mayores. Requiere de sueños dominantes y experimentados en el trato con los perros. En la caza será un buen perro pero habrá que sujetarle para evitar que sea tan independiente.
Resultado mixto (combinado): requiere la repetición del test. Si el comportamiento se repite el cachorro reaccionará de manera imprevisible ante la variación de situaciones.